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Una hernia de disco en Guadalajara hace referencia a un problema con una de las almohadillas suaves, es decir, los discos que se encuentran entre los huesos individuales o vértebras, que se apilan y conforman la columna vertebral. Una hernia discal puede producir molestias que no deberán ser pasadas por alto, por ello es que en esta ocasión les compartiremos información para aprender a identificar las señales que nos manda nuestro cuerpo.

El Dr. Camacho es experto en el diagnóstico, tratamiento y rehabilitación de los padecimientos de la columna vertebral, por lo que se pone a sus órdenes para una revisión a profundidad de ese malestar en la espalda, con el que llevan tiempo conviviendo.

¿Qué diferencias existen entre un dolor de espalda y una hernia de disco?

El principal síntoma de una hernia discal es que se trata de un dolor de espalda que poco a poco incrementará su intensidad, por lo que fácilmente puede ser confundido con una molestia común de espalda. Una de las principales características que lo diferencian de una molestia por hernia de disco es que el dolor aumenta al toser, tratar de flexionar el cuerpo o por estar sentados durante largos periodos de tiempo. Suele ser menos doloroso estar tumbados con las piernas flexionadas o caminar en lugar de estar de pie durante mucho tiempo.

Otro punto importante es que, por lo regular, con la hernia se presenta una sensación de pérdida de fuerza, debido a la compresión de las raíces nerviosas y esto no ocurre con el dolor común. El porcentaje nos dicta que es un 2% de los dolores de espalda que se deben a una hernia discal y que no son un dolor común, sino que se trata de un problema causado por el desgaste de los discos que hay entre las vértebras, aunque no siempre duele o afecta a la pierna (ciática), por ello es importante estar alerta a las principales diferencias entre uno y otro problema.

Cuando el problema es crónico por el rompimiento o lesión del disco, las raíces nerviosas o la la médula espinal pueden verse gravemente comprometidos y la persona puede perder el control de sus hábitos de micción y excreción. Uno de los aspectos a los que debemos prestar mayor atención es que un dolor común de espalda es aquel que desaparece con un poco de actividad física o un masaje en el área, mientras que un dolor derivado de una hernia discal se acentúa con el paso del tiempo alargándose de unos días hasta semanas.

¿Cuándo me debo preocupar por mi dolor de espalda?

El dolor de la espalda es una de las patologías más comunes que atienden los especialistas en columna vertebral. Debido al estilo de vida sedentario de la mayoría de las personas, quienes pasan largas jornadas laborales frente a sus escritorios, aunado a la mala higiene postural, se convierten en desencadenantes de las molestias que tarde o temprano los llevan a consultar al especialista. Los porcentajes arrojan resultados en los que ocho de cada diez personas tendrán malestares en su espalda, en el transcurso de su vida.

Por lo regular, el dolor de espalda no es algo de lo que nos debamos preocupar, ya que la mayoría de las veces es ocasionado por una mala postura, una distensión muscular o en el peor de los casos una hernia discal, pero a su vez encontramos infinitas posibilidades de que el dolor se disipe por sí solo. Estemos alerta para diferenciar si el dolor ha comenzado hace poco, porque si es así es probable que con un masaje, así como la práctica regular de ejercicios como el yoga, solucionen de inmediato la molestia.

Existen casos en que nuestro cuerpo utiliza estos malestares como una forma de alertarnos de que algo no anda bien y que hay zonas de nuestro cuerpo que necesitan de nuestra atención. Las siguientes son señales de alerta que no deberemos pasar por alto y son motivos para acudir al especialista:

  • Cuando no es solamente un dolor de espalda aislado: Si se trata de un dolor severo que ha aparecido repentinamente, acompañado de dolor de mandíbula, náuseas, fatiga o falta de aliento, son signos de que debemos acudir cuanto antes, debido a que podrían ser señales de un ataque al corazón, especialmente si se ha iniciado en el pecho y se ha ido extendiendo, de acuerdo con la Asociación Americana del Corazón.
  • Cuando es muy intenso: Si es tan intenso que no lo alivian los analgésicos y no mejora en tres días o no desaparece en siete días, podría deberse a una hernia de disco en Guadalajara. Además, si se extiende por el brazo o la pierna y es más intenso en esos trayectos que en la espalda o en el cuello y va acompañado de pérdida de fuerza o alteraciones de la sensibilidad.
  • Cuando se produce por la noche: La mayoría de las personas que sufren de dolores de espalda por la noche pueden aliviarlo cambiando de postura y seguir conciliando el sueño, pero si la búsqueda de una postura cómoda se hace imposible o el dolor empieza en cuando nos recostamos en la cama, es señal de que debemos acudir al médico. Y aunque es normal tener algunos dolores y molestias por las mañanas, debemos estar atentos a su duración, ya que si persiste más de 30 minutos, es señal de acudir al especialista. En el peor de los casos podría ser síntoma de un tumor espinal.
  • Que venga acompañado de otras molestias: Si existe fiebre, cansancio extremo, pérdida de peso, es importante acudir al médico si se padecen otras enfermedades o se están tomando medicamentos que contraindiquen algunos tratamientos para el dolor de espalda.

El Dr. Luis Francisco Camacho Herrera es experto en el diagnóstico de aquellos factores que originan el dolor en la espalda y la columna vertebral, como la hernia de disco en Guadalajara. Al obtener un diagnóstico certero, podrán darle un nombre a ese malestar que ha perjudicado su calidad de vida y en caso de necesitarlo, tendrán acceso a la rehabilitación y terapia física más adecuada.

¡Será un placer conocerles! (33) 159 206 62 y (33) 119 609 90.

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