In Blog

La hernia discal, llamada también hernia de disco, disco protuberante y pinzamiento de nervio, son sólo algunos de los términos empleados para referirse a la patología que afecta el disco vertebral, ocasionando dolor en quienes la presentan y es una de las causas más frecuentes de consulta a especialistas en columna vertebral Guadalajara. El uso de diferentes términos para referirse a un mismo problema puede ocasionar confusión en quien ha sido diagnosticado con esta patología. Para evitar este tipo de confusiones por términos intercambiables, entre los que se encuentran también disco desplazado, disco desgarrado, disco roto, disco colapsado, protusión discal y disco negro, se recomienda no preocuparse por las palabras que se emplean para referirse a la patología, sino en entender el diagnóstico preciso y atender las recomendaciones del especialista para su tratamiento.

El médico realiza el diagnóstico partiendo de una revisión clínica del paciente, un examen físico completo y de pruebas diagnósticas, en caso de ser necesarias, para determinar la causa del dolor de espalda, de la pierna y otros síntomas que suelen acompañar esta patología.

En términos generales existen dos tipos de problema de disco que ocasionan los síntomas caracterizados por el dolor: el pinzamiento de nervio y el dolor discal. El pinzamiento de nervio produce una clase de dolor llamada radicular, que comienza en la raíz del nervio y puede trasladarse a otras partes del cuerpo, ya sea la parte baja de la espalda, la pierna o el cuello y el brazo. Este tipo de dolor por lo regular es descrito como ciática, si se presenta en las extremidades inferiores y como cervicalgia si se presenta en el el cuello pudiendo o no afectar la fuerza y sensibilidad de brazos y manos y es ocasionado por un desplazamiento del disco que, fuera de su posición, produce un pinzamiento en el nervio. Por otro lado, el dolor discal es ocasionado por una degeneración sintomática del disco; esta degeneración discal ocasiona dolor en la zona lumbar y contrario a lo que sucede en el dolor radicular este no se irradia hacia las piernas, y por lo regular recibe el nombre de dolor axial. Estas condiciones causantes de dolor se pueden presentar en la columna cervical, dorsal o lumbar, aunque tienden a darse con mayor frecuencia en la parte baja de la espalda debido a que es un área sometida a mayor fuerza y rotación.

El diagnóstico clínico realizado en el consultorio médico consiste en un examen físico, la revisión de síntomas específicos, la revisión de antecedentes médicos y la realización de pruebas diagnósticas. Para comenzar, el examen físico se realiza según los síntomas que presenta el paciente; por lo regular el médico revisa la función nerviosa de la pierna o el brazo, según dónde se presente el dolor, y para ello golpea con suavidad distintas áreas del miembro con ayuda de un martillo de reflejos. La ausencia de reacción o una reacción limitada es indicador que posiblemente la raíz nerviosa se encuentre comprimida. Además de esta prueba el médico puede llevar a cabo pruebas sensoriales para comprobar la reacción de raíces nerviosas a estímulos como el frío y el calor.

Además de la función nerviosa el examen físico incluye la revisión de la fuerza muscular, con las que es posible tener una idea más clara del estado de la raíz nerviosa, ya sea que se encuentre comprimida por una hernia discal o bien, la causa del dolor sea otra. Esto se realiza a través de un examen neurológico y una evaluación visual de los músculos para verificar si existen atrofias, espasmos o movimientos anormales. Otra prueba realizada en el examen médico es la detección de dolor con el movimiento o la palpación. Si el paciente presenta dolor ante la presión en la parte baja de la espalda se puede sospechar de la degeneración de un disco, mientras que si el dolor se da al momento de estirar una pierna posiblemente el nervio esté pinzado, o bien, si al palpar la articulación sacroilíaca el paciente siente dolor posiblemente se trate de una disfunción en la articulación.

Posterior al examen físico se realiza la revisión completa de síntomas específicos. Esta revisión incluye la ubicación del dolor, su descripción y la valoración de cómo mejora o empeora al adoptar ciertas posiciones. Por otro lado, con la revisión de los antecedentes médicos el especialista puede identificar o descartar otras posibles afecciones. Para recabar información de los antecedentes se realizan preguntas acerca de problemas de salud recurrentes, diagnósticos que el paciente ha recibido con anterioridad y sus tratamientos correspondientes, el modo en que reaccionó a los mismos, las cirugías a las que se ha sometido, antecedentes familiares de la enfermedad, los medicamentos que consume actualmente, entre otra información de relevancia para realizar el diagnóstico.

Cuando los especialistas en columna vertebral Guadalajara se han formado una opinión sobre la causa del dolor en el paciente, solicitan pruebas diagnósticas para comprobar si en efecto se trata de problemas de disco y determinar la ubicación de la hernia o raíces nerviosas pinzadas. Estas pruebas diagnósticas pueden incluir tomografías computarizadas, las que funcionan de manera similar a las radiografías para obtener imágenes de secciones transversales de la columna; resonancias magnéticas, para evaluar el estado de los nervios y de la anatomía de la columna, como altura, alineación, configuración de los discos e hidratación.

En caso de que las pruebas recabadas indiquen que se trata de un disco herniado, de una enfermedad degenerativa de disco, y se esté considerando realizar una cirugía para tratarla, se explican las diferentes modalidades de tratamiento que existen actualmente con el fin de seleccionar la mas adecuada para el paciente.

El tratamiento para el dolor de disco depende del diagnóstico preciso que realice el especialista, ya sea una hernia discal o una enfermedad degenerativa de disco. Las primeras opciones que se consideran son los tratamientos no quirúrgicos, que incluyen la aplicación de inyecciones y medicamentos para el dolor, fisioterapia y atención quiropráctica. Únicamente en caso que el tratamiento conservador no arroje buenos resultados se considera una cirugía. El tratamiento quirúrgico puede ser una microdiscectomía, procedimiento que ya explicamos en otras publicaciones en este blog, el cual se utiliza para extraer la parte del disco donde se ubica la hernia, o una artrodesis vertebral, específicamente para el tratamiento de la enfermedad degenerativa del disco, procedimiento que consiste en fusionar el espacio existente entre los discos para eliminar el movimiento y estabilizar la columna vertebral.

Si presentan síntomas que los hagan sospechar de una hernia discal, les recomendamos que acudan con un especialista que se encargue de realizar los exámenes y pruebas para diagnosticar el problema. El Dr. Luis Francisco Camacho Herrera, es uno de los neurocirujanos especialistas en columna vertebral Guadalajara con más experiencia en la atención y tratamiento de hernias discales y otros padecimientos que afecten su calidad de vida, y para agendar una cita sólo tienen que ponerse en contacto con nosotros.

Recent Posts

Start typing and press Enter to search

whats