Los padecimientos de la columna vertebral que no respondan a los tratamientos no invasivos, como el descanso o fisioterapia, requieren de un procedimiento quirúrgico. El encargado de la operación será un neurocirujano especialista en columna vertebral en Gdl., que decidirá entre un procedimiento tradicional o una cirugía mínimamente invasiva, que tiene un menor impacto en el cuerpo y la salud en general. A continuación comentaremos algunas de las principales razones por las que una técnica mínimamente invasiva es la mejor opción para tratar un padecimiento en la columna vertebral.
Las cirugías mínimamente invasivas requieren de una incisión más pequeña, lo que se traduce en menos vasos sanguíneos cortados, se pierde menos sangre durante el procedimiento y la probabilidad de un shock durante la cirugía es mínima.
Los registro realizados por los neurocirujanos en Jalisco indican que los pacientes sometidos a cirugías de columna vertebral abierta tienen alrededor de seis veces más probabilidades de desarrollar una infección si se comparan con las personas que se sometieron a una cirugía mínimamente invasiva.
Las cirugías de este tipo requieren realizar menos incisiones, además de ser más pequeñas, en comparación con una incisión de varios centímetros realizada por los métodos tradicionales; por lo tanto, las cicatrices serán más pequeñas, no tan ásperas ni antiestéticas.
Las incisiones de procedimientos quirúrgicos tradicionales requieren cortar piel, músculos y otros tejidos. Los tejidos musculares dañados causan dolor y se alargan durante la recuperación; por ello, los neurocirujanos buscan reducir los cortes para minimizar los efectos en el cuerpo.
Las cirugías tradicionales requieren de una estadía prologada en los hospitales, mientras que con un procedimiento mínimamente invasivo pueden regresar a casa en el mismo día del procedimiento.
El menor daño en el cuerpo resulta en menos tiempo de recuperación; las técnicas tradicionales requieren de seis a ocho semanas de recuperación, mientras que en las mínimamente invasivas, los pacientes se recuperarán aproximadamente en dos semanas.
Es una de las principales ventajas en comparación con los procedimientos tradicionales; se tiene una mejor vista de la columna y los tejidos involucrados, lo que aumenta la precisión y minimiza el riesgo.
La cirugía mínimamente invasiva para la columna vertebral es un procedimiento que ha sido muy probado con éxito por años y ha permitido que los neurocirujanos en Guadalajara, como el Dr. Luis Francisco Camacho, brinden la mejor atención y los pacientes puedan recuperarse de los problemas de columna que requieren cirugía. Los invitamos a agendar un cita en nuestras instalaciones al teléfono (33) 1592 0662 y (33) 1196 0990 y al correo electrónico neurocirugiadrcamacho@gmail.com.
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