Los neurocirujanos en Guadalajara son los especialistas idóneos para tratar un gran número de enfermedades o lesiones del cerebro, columna, médula espinal y nervios periféricos que incluyen principalmente la cirugía y otros tratamientos. Una de las afecciones que a lo largo del tiempo ha preocupado en gran manera a médicos y afectados; es la hidrocefalia.
Se estima que alrededor de 700 casos de hidrocefalia son recibidos por los especialistas en México. Antiguamente el tratamiento era complejo y su diagnóstico tardío. Sin embargo, en la actualidad este panorama ha cambiado considerablemente y es posible iniciar un tratamiento en el menor tiempo posible para evitar mayores repercusiones en la salud. De ahí, radica la importancia de visitar al especialista indicado como método preventivo y de acción temprana.
El cerebro produce constantemente un líquido (más precisamente líquido cefalorraquídeo), que tiene la función de proteger el cerebro y la médula espinal de los daños, eliminando los residuos del metabolismo cerebral y proporcionando al cerebro las hormonas necesarias para su correcto funcionamiento. Quizás, muchos de los lectores no lo sabían; pero es de gran importancia para el correcto funcionamiento de este órgano tan importante.
Este líquido se conoce también como LCR y se produce a partir de la sangre por unas estructuras particulares denominadas plexos coroideos en una cantidad igual a 150 ml por día en el adulto. Este líquido, además de rodear el cerebro en el espacio subaracnoideo, también está contenido dentro de grandes cámaras llamadas ventrículos que se encuentran en la parte profunda del cerebro. Hay 4 ventrículos y están conectados al canal central de la médula espinal.
En condiciones particulares, aumenta la cantidad de líquido que se encuentra dentro de los ventrículos cerebrales. A esta condición se le conoce como hidrocefalia. Este líquido se distingue por ser claro que rodea al cerebro y la médula espinal. Por lo tanto, la hidrocefalia es conocida como una malformación compleja del SNC cerebral, caracterizada por una acumulación de líquido cefalorraquídeo en el espacio ventricular.
En la hidrocefalia se produce la acumulación exagerada y patológica del líquido cefalorraquídeo provoca un aumento de la presión intracraneal, que si no es tratada a tiempo, puede desencadenar trastornos graves: alteraciones psíquicas, convulsiones, aumento del perímetro cefálico, déficits intelectuales y trastornos del estado de ánimo. Estos son tan solo algunos de los innumerables síntomas que genera esta enfermedad que afecta tanto a niños, jóvenes y adultos; pero suele ser más común en infantes.
El diagnóstico temprano es de suma importancia, al igual que los tratamientos terapéuticos precoces para evitar trágicas consecuencias y que el paciente mejore considerablemente, en la medida posible porque los efectos pueden llegar a ser nefastos y comprometen en gran manera la calidad de vida del paciente. Es por eso que es de gran relevancia acudir a los neurocirujanos en Guadalajara para que lleven a cabo el tratamiento pertinente que cada niño necesita.
Está presente al nacer. Se estima que alrededor de 1 de cada 1000 bebés nacen con este problema. Puede estar asociado a otros problemas congénitos, como espina bífida o puede resultar de una infección materna durante el embarazo, como rubéola, sífilis, citomegalovirus, toxoplasmosis, entre otros. La causa más común es un bloqueo en la circulación del LCR. Los bebés que nacen con hidrocefalia suelen tener características físicas peculiares, como:
Además de estos signos físicos, el niño puede presentar los siguientes síntomas:
De igual manera, el infante puede presentar retraso en el desarrollo de su edad normal, presentando dificultad para caminar o gatear. Es de gran relevancia estar pendiente a cada uno de los síntomas si estos persisten para acudir de manera inmediata a los neurocirujanos en Jalisco que lleven a cabo el diagnóstico necesario y así iniciar de manera temprana el tratamiento pertinente de acuerdo con el desarrollo y avance de la enfermedad.
Se distingue porque ocurre después del nacimiento. Por lo general, se desarrolla después de un traumatismo craneoencefálico importante o como resultado de una enfermedad subyacente, como un tumor cerebral. Los síntomas incluyen:
El diagnóstico de hidrocefalia consiste en una evaluación clínica cuidadosa y el uso de varias investigaciones instrumentales: historial médico, examen físico general, prueba neurológica, prueba de imagen cerebral. Estas son indispensables para rectificar el diagnóstico y en caso de ser positivo, evaluar el avance de la enfermedad y el estado en el que se encuentra el niño para determinar si ha repercutido de manera negativa.
Se realiza con el fin de analizar reflejos, fuerza y tono muscular, sentido del tacto, audición, capacidad de coordinación e integridad mental.
Útil para evaluar la posible distensión de los ventrículos, provocada por la acumulación de LCR. La prueba de resonancia magnética también está indicada para rastrear la causa desencadenante de la hidrocefalia y evaluar la dinámica del líquido.
Indicada para conocer la sospecha de hidrocefalia en el recién nacido. El procedimiento prácticamente no presenta ningún riesgo para el paciente y puede ser útil para diagnosticar la hidrocefalia antes del nacimiento.
La prueba es indolora y dura aproximadamente 20 minutos para determinar si hay hidrocefalia y el estado en el que se encuentra.
Consiste en el estudio radiológico de la morfología de las arterias, realizado mediante inyección en la misma arteria a analizar.
La prueba se realiza mediante punción lumbar (o raquicentesis). Este procedimiento diagnóstico consiste en tomar una muestra de LCR en las vértebras L3, L4 o L5.
En la actualidad, hay distintos tratamientos que los neurocirujanos en Guadalajara evalúan para aplicarlos en cada niño de acuerdo con el tipo de hidrocefalia que presenta, el desarrollo y avance de la afección, enfermedades pre existentes y el estado de salud del paciente. Si acude al especialista indicado, su hijo estará en las mejores manos para recibir la atención oportuna y temprana.
El tratamiento más común de todos para la hidrocefalia es la cirugía de derivación para un drenaje. Esta intervención consiste en reabsorber con mayor facilidad el exceso de líquido LCR, a través del drenaje del líquido hacia el exterior, que permite en pocos minutos solucionar el principal problema relacionado con la hidrocefalia, la hipertensión intracraneal.
La endoscopía cerebral es un tratamiento mínimamente invasivo mediante el cual, el mejor neurocirujano en Guadalajara como el Dr. Luis Francisco Camacho Herrera puede resolver la hidrocefalia o extirpar una neoplasia, localizada en estructuras profundas del cerebro, a través de una pequeña incisión y un pequeño orificio en el cráneo. Es una intervención que se caracteriza por brindar diferentes ventajas, en la que se destaca la disminución en el tiempo de hospitalización del paciente.
El Dr. Luis Francisco Camacho Herrera es el especialista indicado que puede tratar a sus hijos en caso de hidrocefalia. En primer lugar, es importante que lleven de manera periódica al médico a su hijo/a y en caso de presentar alguno de los síntomas mencionados en este artículo, consulten al doctor Camacho para que reciban la atención oportuna y temprana. Para agendar su cita, pueden llamar al (33) 1196 0990.
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